Diego Agrimbau: "Me pasaron cosas como autor que nunca imaginé, que no sabía que podían pasar, viajes, conocer autores y formas de hacer historieta insospechadas en lugares remotos".

Diego Agrimbau es un guionista con un gran recorrido en el mundo de las viñetas. Sus obras se han publicado en varios países y ha obtenido una gran cantidad de premios en Argentina, España y Francia. 
Ha colaborado en las míticas revistas Heavy Metal, Kiss Comix, Vertigo CMYK y Fierro, por mencionar algunas.
Estuvimos conversando con Diego acerca de su novela gráfica ¿Quién mató a Rexton?, editada en 2018, que agrupa una selección de dibujantes para dar forma a una cautivante historia noir que desafía los límites entre realidad y ficción para que el lector también sea parte.

¿Cuáles fueron las obras noir que más te marcaron?
De muy joven leí varios libros de Raymond Chandler. Casi no me acuerdo nada, pero se ve que algo debe haber quedado. Y en historieta, claramente Alak Sinner y Evaristo están entre mis preferidas. Sampayo es una referencia ineludible. Otro es Carlos Trillo, especialmente por el uso que hacía de la meta-ficción, personajes que eran historietistas, dibujantes, escritores, etc. Por ejemplo, en Peter Kampf, entre otras.

¿Cómo nació Quién Mató a Rexton?
Es muy largo de contar, pero resumiendo, surgió hace más de diez años en reuniones con mis amigos dibujantes. La idea era hacer una obra conjunta, no necesariamente Rexton en particular. Una antología interconectada. Luego de varios ensayos, salió la idea de Rexton. Durmió en un cajón durante años hasta que fue reflotada por Diego Rey del Hotel de las Ideas, que me dijo que si la hacíamos, ellos la publicaban. Fue la excusa perfecta para terminar de escribirla y dibujarla.

¿Por qué la elección de trabajar con varios dibujantes?
Desde Arkanov, el fanzine que yo hacía en los 90's junto a muchos dibujantes más, que no encaraba una antología con varios dibujantes, que es algo que todos los guionistas argentinos hacen habitualmente. Así que, yo también quería darme el gusto de hacer una. Eso sí, va a pasar mucho tiempo hasta que se me ocurra encarar otra cosa así. Es difícil ponerse de acuerdo con los diseños, las historias y coordinar todo. Es como un matrimonio, pero en vez de estar casado con uno, estás casado con siete. Un quilombo. Un quilombo hermoso, pero un quilombo.

¿Sentís que integraste una suerte de Dream Team de la novela gráfica argentina?
Hay muchos buenos dibujantes en nuestro país y se podrían hacer varios dream teams. En tantos años hubo varios cambios de formación en Rexton, antes de que se completara el staff final. Pero sí, estoy muy contento con la calidad gráfica que quedó. Es raro ver un nivel tan parejo en una antología, cada uno con su onda. 

Ya tenés un gran recorrido en el mundo de las viñetas. ¿Tenés algún sueño cumplido? ¿Y uno por cumplir?
Sueños cumplidos tengo un montón, afortunadamente. Desde cuestiones profesionales más prosaicas, tipo publicar en tal o cual editorial o país, hasta más espirituales, que tienen que ver con la devolución que te llega de los lectores. También me pasaron cosas como autor que nunca imaginé, que no sabía que podían pasar, viajes, conocer autores y formas de hacer historieta insospechadas en lugares remotos, etc. Un sueño por cumplir, difícil, es hacer una serie larga. Me gustaría algún día pasar de los formatos de libro o novela gráfica a una serie que sume cientos de páginas. Lo más parecido a eso que hice fueron los Canillitas con Fernando Baldó. Pero me encantaría hacer algo así para cualquier mercado, con mucho espacio para desarrollar historias en duraciones que todavía no hice. 

¿Cuáles son tus próximos proyectos?
Ahora estoy armando nuevos proyectos, pero son muy incipientes como para contar algo, con los mismos de siempre. Suelo ser fiel a los dibujantes con los que ya trabajé. No innovo tanto. Igualmente, siempre aparece algún nuevo dibujante o dibujanta que me llama la atención y me tienta probar suerte con un guión. Lo que sí hay son varios libros ya terminados que tienen que salir en el mediano o largo plazo: L'Humain es una novela gráfica que hicimos con Lucas Varela y que saldrá este año por Dargaud, en Francia. También está terminada una adaptación de La Eneida con Marcelo Sosa que salió por Capstone en EEUU y este año sale por Latinbooks en nuestro país y Latinoamérica. Guaraní, con Ippóliti, sale este año por El Hotel de las Ideas. Y hay varios más para el año que viene o cuando se pueda: una reedición de El Asco y la primera edición de Camping junto a Dante Ginevra, seguramente por Agua Negra; la edición nacional de Planeta Extra y me encantaría poder tener una edición en papel de Miráme, la historieta que hacemos con Tomás Aira para Viñeta Uno, aún sin editorial. Mientras sigo publicando historias cortas en la revista Heavy Metal de EEUU, junto a Agustín Alessio y otros dibujantes.
  
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